Donkey Kong Land (Game Boy)
- 10.00
- Votos Totales: 3
- Autor: fran_friki (envios at peaso dot com)
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Donkey Kong y Diddy Kong habían triunfado en su aventura, y con el Rey K. Rool y sus secuaces derrotados, se dispusieron a darse un buen festín con las toneladas de bananas recuperadas. Cranky estaba muy celoso de ellos, y declaró textualmente que "su aventura en Donkey Kong Country fue tan famosa y exitosa debido a los bonitos gráficos y magistral sonido, y que seguro que no se atrevían con un desafío de 8 bits". Debido a su enfado, se puso en contacto con el derrotado Rey K. Rool, y le dijo que robase de nuevo los plátanos para que nuestros monos aceptasen su desafío en Game Boy. Cranky, entre pequeñas carcajadas, les deseó suerte, no sin antes arrearles un buen golpe a ambos con su bastón.
Donkey Kong Land, lanzado en Junio de 1995, fue la esperada respuesta de los amantes de Donkey Kong Country tras su salida en 1994, esta vez en la portátil Game Boy. Técnicamente, aunque parezca una secuela, tiene más acercamiento a un Spin-off, ya que la verdadera segunda parte saldría meses más tarde, bajo el nombre de Donkey Kong Country 2: Diddy's Kong Quest (1995, SNES). Como Spin-off que es, cuenta con elementos de Donkey Kong Country, pero también con nuevos elementos. Así, este juego llegó a ser toda una joya, lo que le valió a Rare una buena puntuación y como no, millones en ventas, conquistando al público de Game Boy.
Gráficamente, es una muy buena adaptación del clásico de SNES. Las animaciones son exquisitas; como en SNES, cada enemigo y personaje cuenta con detallados Sprites, pre-renderizados también, aunque en blanco y negro. Donkey Kong y Diddy no podían aparecer a la vez en pantalla debido a las limitaciones de la consola, por lo que se optó por mostrar sólo a uno mientras el otro permanecía oculto; este aparecía al perder un mono o al llamarlo con SELECT. Los fondos de pantalla fueron drásticamente modificados, pero aun nos recuerdan mucho a los de SNES, sobre todo los niveles acuáticos. Los niveles en sí son increíbles, con un aspecto sin desperdicio; igualmente los barriles y diversos objetos tienen un buen aspecto. Hay enemigos nuevos y viejos, todos ellos fantásticos como siempre; los Kremlings continúan su legado, pero se han añadido nuevos al plantel. Algunas cosas han cambiado: los Checkpoints ya no son barriles estrellados, sino círculos metálicos con un pulgar en ellos. El final de cada nivel es también una especie de círculo "dimensional" que te saca del nivel. Las letras KONG y Bonus guardan un aspecto parecido al clásico de SNES. Algo curioso es el aspecto de los niveles del barco, tremendamente parecidos a Donkey Kong Country 2 de SNES; pero recordemos que este título es anterior en el tiempo (aunque parece haber cierta conexión de trabajo entre ambos títulos, quizás fueron desarrollados paralelamente por el mismo equipo). Las vidas siguen siendo globos, pero ahora se muestran en forma de corazón abajo del todo. En resumen, da la sensación total de estar jugando a Donkey Kong Country pero en tu Game Boy, Rare lo ha conseguido.
En cuanto a jugabilidad entramos verdaderamente en materia; es el encanto de Donkey Kong Land. Tanto su adicción como su dificultad mantienen al jugador delante de su consola; no importa que lo emules, que juegues en la SNES con Super Game Boy, o en la propia Game Boy, si te gustan las plataformas y Donkey Kong, lo vas a vivir. Los niveles son largos, difíciles en algunos casos, y llenos de secretos. Tanto encontrar los Bonus como encontrar las Monedas Kong te mantendrán ocupado. Los mundos se han visto reducidos, pero poseen una gran cantidad de niveles, y varios caminos a seguir dentro de ellos. Ciertos niveles tienen 2 salidas, ¡explóralos bien! Al igual que en su antecesor de SNES, los Bonus serán importantes a la hora de completar al 100% un nivel; recuerda comprobar si el nivel tiene una "!" junto a él, indicando que lo completaste al máximo. En materia de controles, hay algunos defectos notables; el salto puede a veces resultar tosco y poco fluido, pero con práctica te acostumbrarás, aunque alguna vida perderás en el intento. Esto fue solucionado en la segunda parte de esta saga. Los movimientos de rodar, nadar y trepar siguen intactos; Rambi nos acompañará también en ciertos niveles. Como Spin-off, sus niveles se asemejan a los antiguos (los de selva, templo y nieve, por ejemplo), pero también hay nuevos diseños, completamente diferentes. Procura obtener todas las Monedas Kong posibles; servirán para ganar vidas extra. Adorarás este juego si lo ves con buenos ojos.
La música es espectacular. A pesar de los 4 canales de audio que tiene Game Boy, las melodías rebosan de carácter. Hay remixes de las canciones de SNES, algunas otras nuevas, y algunas casi intactas. Los efectos de audio se han visto reducidos notablemente, pero son acertados y no molestan. El sonido en general no te dejará indiferente.
Curiosamente, el cartucho del juego es de color amarillo, una seña que Rare quiso incluir (en cierta manera, el amarillo se relacionaba con Donkey Kong Land en 1995). Otra curiosidad para Geeks es la canción incluida en los jefazos. Si te fijas, verás que fue utilizada más adelante en el juego de Nintendo 64, "Blast Corps", en varios de sus niveles; un pequeño guiño a un querido juego de Game Boy.
En resumen, una joya de juego. Clásico, imperdible, divertido e impresionante, y merecedor de una secuela llamada Donkey Kong Land 2.
- Año: 1995
- Fabricante: Nintendo
